OBRAS SOCIALES

LA CORRUPCION DEL SISTEMA DE SALUD ARGENTINO

Desde que Juan Carlos Onganía les obsequió a los sindicalistas peronistas el sistema de obras sociales para que abandonaran a Juan Perón, la medicina pública argentina sufrió un durísimo revés estructural. Los acontecimientos recientes en la obra social de los bancarios -una entidad que ha sufrido situaciones financieras caóticas en reiteradas oportunidades en los últimos 20 años- pueden promover allanamientos similares en otras obras sociales, un sistema bajo sospecha, defendido a capa y espada por los corruptos sindicalistas pero que, junto al ’sui generis’ sistema de medicina pre-paga impide un reordenamiento del sistema de salud argentino (que nunca podrían abordar los Kirchner, obviamente).

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). El nombre de Néstor Lorenzo (foto) lo brindó, por 1ra. vez, Christian Sanz, en Tribuna de Periodistas, en el marco de la investigación por el asesinato de Sebastián Forza, a quien él entrevistó antes del secuestro y muerte.
Una y otra vez Christian Sanz puso la lupa sobre Néstor Lorenzo:
El 27/07: “Hace unos días, entrevisté a un empresario vinculado a la salud argentina, otrora titular de una conocida droguería relacionada con los aportes de campaña a Cristina Kirchner en el año 2007. Su primera frase me dejó pasmado: “Si hay un lugar donde no quisiera estar es en los zapatos de Sebastián Gramajo, cuyo jefe político es Héctor Capaccioli”, disparó sin vacilar.

Posteriormente, trazó en el aire un oportuno croquis sobre los vínculos entre Capaccioli, ex superintendente de Servicios de Salud (foto izquierda); y el Dr. Néstor Vázquez, ex gerente de Prestaciones de ese mismo organismo (foto derecha). Vázquez ha sido una suerte de “socio” de Néstor Lorenzo, titular de la oscura droguería San Javier e ideólogo junto a Capaccioli del blanqueo de fondos para la campaña electoral del Frente para la Victoria.

Es dable mencionar a ese respecto que desde hace unos meses existe una denuncia penal contra el kirchnerismo por lavado de activos. Se trata de un expediente que se ha iniciado merced a una investigación iniciada por este periódico (1) y que avanza raudamente, ya que media docena de supuestos aportantes al kirchnerismo en 2007, admitieron a la Justicia que en realidad nunca pusieron un peso. Es exactamente lo mismo que aseguró el informante entrevistado por este cronista en las últimas horas.

El patrón es siempre el mismo y está relacionado a jugosos negociados que se han hecho en torno al sistema de salud argentino, gracias a la connivencia de poderosos funcionarios oficiales, sindicalistas tuertos e importantes droguerías y laboratorios medicinales. Oportunamente, el fallecido Sebastián Forza (foto) lo admitió sin medias tintas: “Acá hay un sistema por el cual se falsificaron recetas médicas, se inventaron pacientes y hasta se adulteraron remedios carísimos para llenar los bolsillos de unos pocos delincuentes”. Forza sabía de lo que hablaba, ya que se definía a sí mismo como parte de esa misma mafia.

(..) El mapa aportado por el informante se ha contrastado con información ya publicada en Tribuna de periodistas, reveladores documentos y entrevistas efectuadas en las últimas semanas con funcionarios públicos y empresarios privados. Este es el resultado de lo que debe investigar la Justicia: (…)
-Droguería San Javier: está relacionada a Javier Torres, Néstor Lorenzo y el ex agente de la SIDE Julio César Pose.

-Multipharma: está relacionada a Torres y Lorenzo. Estas últimas dos firmas —San Javier y Multipharma— están vinculadas no sólo a los aportes de la campaña, sino también a la adulteración de medicamentos.
-All Medicine: aportó a la campaña, está relacionada a Néstor Lorenzo.

-Fidei Salud: aportó a la campaña, está relacionada a Néstor Lorenzo.

-Framaline: aportó a la campaña, está relacionada a Néstor Lorenzo.

-Fharmaz Group: está relacionada a Damián Ferron, la Obra Social de Bancarios, Néstor Lorenzo y Martín Magallanes.

-Droguería Del Plata: aportó a la campaña, está relacionada a Unifarma y San Javier.

-Eglis: está relacionada a Unifarma, San Javier y la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).

-Drogueria Plaza: está relacionada a Unifarma, San Javier y ANMAT.

-Hospital Francés: está relacionado a José Luis Salvatierra —ex interventor del Hospital Francés—, Capaccioli, Lorenzo, y Forza.

-Marcelo Abasto: financista de Forza y uno de los que lo amenazó de muerte.

-Centro Oncológico De Excelencia (COE): está relacionado con Lorenzo.
Finalmente, habría que indagar sobre puntuales personajes, también involucrados directamente con este escándalo. Uno de ellos —actor principal si los hay— es el bancario Juan José Zanola, más que cercano a Néstor Lorenzo. De la misma manera, habría que indagar sobre la supuesta sociedad entre este último junto a Carlos Torresin —¿seudónimo de Javier Torres?— y el papel que jugaron Gustavo Valsecchi, Eduardo Cesar Angeloz y Javier Gauna. (…)”.

El 06/08, por ejemplo, otra vez:
“(…) -Carlos Torres: titular, junto a Héctor Lorenzo, de droguería San Javier, una de las más sospechadas por negociados con medicamentos y fuerte aportante a la campaña de Cristina Kirchner. Asimismo, habría importado grandes cantidades de efedrina en los últimos años.

-Héctor Capaccioli, ex superintendente de Servicios de Salud y su “ladero”, José Luis Salvatierra, interventor del Hospital Francés. Ambos fueron mencionados por Forza como “puente necesario” para hacer ciertos negociados relacionados con los fármacos y han manejado la oscura recaudación de la campaña de Cristina Kirchner en 2007.

Es dable recordar que, si bien Forza apareció como aportante en la campaña de marras, nunca puso dinero, sólo su firma. (…)”

Ahora, han ocurrido novedades sobre el tal Lorenzo. Por ejemplo, Carlos Pagni en el diario La Nación:
“Néstor Lorenzo, el empresario farmacéutico detenido por orden del juez Norberto Oyarbide, es socio mayoritario de droguería San Javier.

A San Javier se la investiga por ser una de las principales productoras de expedientes falsos para arrancar al Estado, a través de la Superintendencia de Salud, subsidios para enfermos crónicos -en especial de cáncer y sida- inexistentes.
El cobro de ese dinero se realizaba a través de sindicalistas cómplices que administran obras sociales. Entre otros delitos, también se presume que San Javier proveía los medicamentos adulterados que se aplicaban a enfermos oncológicos en el Policlínico Bancario, según denunciaron médicos de ese sanatorio. Ayer se incluyó un allanamiento a la Asociación Bancaria.

Lorenzo realizaba las operaciones de las que se lo acusa durante la gestión de Héctor Capaccioli como superintendente de Salud.

El vínculo entre Capaccioli y Lorenzo fue, según innumerables fuentes del sector, Néstor Vázquez, el gerente general de la Superintendencia, que ya había cumplido importantes funciones en ese organismo durante la gestión del sindicalista José Luis Lingeri, cuando gobernaba Carlos Menem.

Capaccioli actuaba como superintendente amparado por Alberto Fernández. El entonces jefe de Gabinete, que en 1999 estaba al frente de la colecta de fondos de campaña de Eduardo Duhalde, lo designó recaudador para el proselitismo de Cristina y Néstor Kirchner.

Cuando se allanó el domicilio de Lorenzo, se encontraron allí numerosos recibos por los aportes a las campañas oficialistas. Entre los socios de la droguería de Lorenzo está Carlos Horacio Torres, quien figura como el principal mecenas de Cristina Kirchner en la contabilidad del Frente para la Victoria de 2007.

El escándalo de la apropiación de recursos del Estado a través de expedientes fantasma (…) estalló cuando uno de los empresarios ligados a Lorenzo, Sebastián Forza, fue asesinado en General Rodríguez, por su vinculación -presume la Justicia- con el tráfico de efedrina. (…)”.

Ignacio Fidanza en La Política Online, el viernes 05/09:
“Luego de una serie de artículos en los que el diario Perfil sacó a la luz los vínculos de la mafia de los medicamentos truchos con el sindicalista bancario kirchnerista, Juan José Zanola, el juez Norberto Oyarbide avanzó hoy con gran impulso. Ordenó una serie de allanamientos que generaron gran revuelo y temor hasta en el interior de la CGT.

En este mismo instante, la Justicia allana el Policlínico Bancario (POBA) y, a su vez, detienen al dueño de la droguería San Javier, Néstor Lorenzo, señalado por la ex ministra de Salud, Graciela Ocaña, como el “Yabrán de los medicamentos”. Todo en torno a la causa en la que Oyarbide investiga la presunta venta de medicamentos adulterados y robados en el marco de la causa de tráfico ilegal de efedrina.
Lorenzo había sido vinculado por Ocaña, quien motoriza la investigación, en sus denuncias sobre la presunta mafia farmacéutica, y en otras denuncias sobre el suministro de medicamentos adulterados en la Obra Social de la Asociación Bancaria (OSBA).

“Están allanando por partida doble: unos en el POBA y otros en la sede de la obra social de la calle 25 de mayo”, empezó a contar a este medio Hugo Dessal, ex funcionario del gremio de Zanola y principal denunciante del revulsivo caso que sacó a la luz hace días el diario Perfil.

Según contó a La Política Online, “sacaron archivos y expedientes” y apuntaron a María Ríos, encargada de la Administración de Programas Especiales (APE) en el gremio que, especulan, sería familiar directo del apresado Lorenzo. “También en 25 de mayo, en este momento, están en el tercer piso –donde funciona el área de finanzas- buscando elementos y secuestrando recibos de sueldo”.

Luego de bloquear el sistema de informática, los investigadores estarían chequeando firmas si, como se cuenta en las notas del matutino porteño, hay nexo entre la sospechada empresa San Javier y la administración de la entidad que dirige desde hace años Zanola, sindicalista de excelente relación con la Casa Rosada y, principalmente, con el ministro de Planificación, Julio De Vido.
“Venimos denunciando que (Damián) Ferrón y Forza –dos de los tres asesinados en el famoso triple crimen de General Rodríguez- venían siempre al policlínico. No entendemos como no asocian que la camioneta de Forza fue quemada a 4 cuadras del policlínico, no entendemos como Solange –la viuda de Forza- apareció pidiendo una entrevista con Zanola, como no cruzan las llamadas. Creo que ha llegado el momento que estamos buscando”, agregó Dessal en una avalancha de información clave.

El vínculo de Forza con Zanola roza también a su actual pareja, Paula Aballay –“a la verdadera esposa la tiene guardada en un loquero”, agregó una fuente bancaria a este medio-, quien por estas horas sería indagada por el juez Oyarbide, quien extendió los allanamientos a una treintena de laboratorios más.
“En el subsuelo del POBA funcionaba el depósito de San Javier, por eso cuando lo allanaron en la causa de la efedrina no había nada”, dijo a este medio la fuente. Además, contó que están esperando material fotográfico donde se ve a la mismísima mujer de Zanola y Forza, días antes de ser asesinado, sacando medicamentos del Policlínico en la camioneta que luego apareció incendiada.

Según detallaron, Aballay empezó su carrera como enfermera –en una coincidencia trágica- en el Hospital de Oncología Marie Curie, “dando aspirinas y agua a pacientes con cáncer”.

“Total, decía, van a morir de una u otra forma”, agregó con indignación la fuente consultada. (…)”.

Luciana Geuna en Crítica Digital:
“(…) Néstor Osvaldo Lorenzo tenía su primera reunión a las nueve y media de la mañana. Todavía le faltaba una hora para salir de su casa, en Senillosa 957, cuando el comisario Néstor Ramón Roncaglia, de la Unidad de Investigación Técnica del Delito de la Policía Federal, golpeó la puerta y lo encontró desayunando con su novia. Nunca llegó a su cita. Ayer, por orden del juez Norberto Oyarbide, este empresario de la salud que hacía negocios con Sebastián Forza, y que aportó casi un millón de pesos a la campaña presidencial de Cristina Kirchner, quedó detenido imputado en una megacausa que sigue la pista de la mafia de los medicamentos. Se trata de una red de droguerías y laboratorios que comercializa remedios en mal estado para pacientes oncológicos, hemofílicos y con sida en supuesta connivencia con sindicatos y políticos.

Ayer, mientras se llevaban preso a Lorenzo, el juzgado federal Nº 5 también ordenaba 30 allanamientos a empresas vinculadas al empresario, además de estudios jurídicos, escribanías, financieras, el Policlínico Bancario y la obra social de ese sindicato que lidera Juan José Zanola, un emblema del menemismo que se convirtió rápidamente al kirchnerismo explícito. El desfalco financiero de su obra social es conocido por todos los gobiernos de los últimos veinte años, pero Zanola –confió una fuente oficial a este diario– sobrevive a cambio de financiamiento desmedido del Estado y profundos vínculos políticos.

La caja que esconde todas las respuestas sobre estas relaciones se llama Administración de Programas Especiales (APE), y el juez tiene pruebas que unen a ese organismo con el sindicato y la droguería San Javier, propiedad de Lorenzo. El APE es una entidad autárquica dependiente del Ministerio de Salud, pero con una vinculación histórica con la Superintendencia de Servicios de Salud. Tiene la responsabilidad formal de asignar partidas especiales para subsidiar a las obras sociales en la compra de medicamentos costosos y de alta complejidad: el nicho de negocios a los que se dedicaban todas las droguerías que se hicieron conocidas con el caso del triple crimen y que están siendo investigadas por Oyarbide porque comerciaban medicamentos truchos y en algunos casos ni siquiera entregaban remedios a cambio de dinero. Parte de la investigación revela que presentaban troqueles truchos.

Hasta el año pasado, estaba Héctor Capaccioli a cargo de la Superintendencia, quien también fue recaudador de las campañas kirchneristas. Su trabajo quedó muy claro en el listado de aportes en la carrera de Cristina Fernández hacia la Presidencia: aparecieron no sólo las sociedades vinculadas a los muertos del triple crimen de General Rodríguez, sino también otras droguerías y empresas de dudosa legalidad, incluidas algunas relacionadas con Lorenzo.

En noviembre de 2008, y en el marco de esta investigación, Oyarbide allanó la casa a la que ayer volvió para detener a Lorenzo. Entonces, encontró una carpeta que tenía como carátula: “Aportes a la campaña 2007”. En su interior había recibos por 945 mil pesos entregados para la candidatura de Cristina Kirchner a través de socios y distintas droguerías. (…)”.

Sin duda, habrá más noticias para este boletín. Y nombres de obras sociales.
.Urgente24
Share on Google Plus

About Charles Francis

    Blogger Comment
    Facebook Comment

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Tienen que terminar todos en la carcel señor juez oyarbide.
Matar a enfermos con medicamentos falsos es la peor corrupción que en visto de le podedumbre argentina.
BASTA DE CORRUPTOS ASESINOS!!!Juan Carlos
La Plata

Anónimo dijo...

paula on 17 de septiembre de 2009 13:52 dijo...
en Rosario es=,hubo elecciones en sindicato con fraude,los que ganaron ubicaron a amantes de ellos para controlar la decadente obra social,lo que vimos no es novedad ese maltrato es =para los afiliados que aportan a estos animales mafiosos esperamos que se investiguen a todas las delegaciones del interior que son peor que BsAs
Averiguen que pasa con las la gente de Rosario centro de la corrupcion,sindicato manejado por ineptos mafiosos