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Caos, nervios e incertidumbre dominan las oficinas de las administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones desde el anuncio oficial. El ministro de Trabajo dijo que todavía es pronto para anunciar el destino de los 9.500 empleados de las AFJP, pero aseguró que “el Gobierno cuidará las fuentes de trabajo”.
Los trabajadores piden el 100 por ciento de indemnización y viven el día a día sin saber cómo terminará la jornada.
En la intimidad revolucionada de las AFJP, fue una semana de “actividad cero”, exceso de nervios y preocupación en todos los niveles jerárquicos de las empresas, miles de trabajadores matando el tiempo en las oficinas porteñas, entre mate, café y la atención permanente a las noticias radiales y televisivas sobre la situación del sector. Los empleados del área de comercialización, señalados como el grupo más vulnerable a perder el empleo tras el anuncio de estatización del sistema de previsión social, no sólo debieron lidiar con su propio infortunio sino también con los incesantes llamados de clientes de las AFJP reclamando su dinero. Según la delegada de MET, Cyntia Leszczynski, representan casi el 80 por ciento del personal.
“Los teléfonos no cesaron. ‘Vos me vendiste esto, ¿qué va a pasar con mi plata?’, nos decía la gente. Pero no sabemos ni qué va a ser de nosotros”, cuenta en reserva una empleada de Orígenes.
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, admitió a PERFIL: “Estamos en una primera etapa del cambio. El escenario no es claro”. Luego de una charla organizada por el Centro Cultural Paco Urondo, Tomada intentó minimizar el impacto laboral de la imprevista reestatización de las AFJP: “El jueves recibimos de las empresas los padrones de trabajadores. Son 9.500 trabajadores. No todos están en relación de dependencia, como los promotores y productores (de seguros). Tenemos que analizar las distintas categorías laborales, no sabemos todavía si la ley va a ser aprobada, ni cuántas empresas se quedarán y cuántas se irán del país”. Para llevar tranquilidad al sector, el funcionario dijo que “el Gobierno se compromete a absorber a quienes pierdan sus puestos. El 50 por ciento de los empleados de la Superintendencia de AFJP trabajan en las comisiones médicas y serían incorporados a la Superintendencia de Salud; los empleados del sector ingresarían en la ANSES y la AFIP”.
Los delegados de las AFJP reclaman que se les pague el 100 por ciento de las indemnizaciones. Mientras, Leszczynski denuncia que “el miércoles, las compañías reunieron a los trabajadores y les informaron que ante la situación de crisis, podrían apelar a herramientas legales para pagar sólo el 50 por ciento de indemnización”. El panorama se complicaba aún más que el martes, cuando varias AFJP “ofrecieron a los empleados un 20 por ciento extra de indemnización y tres meses de prepaga si acordaban desvincularse de la empresa”. En 24 horas, el ofrecimiento se había frustrado y la oferta había disminuido un 70 por ciento.
Hace dos meses, Orígenes fue adquirida por el grupo ING. Ante el anuncio oficial, “intimaron a través de telegramas a los empleados que están en edad jubilatoria para que realicen los trámites correspondientes”, dice otro empleado de la firma, quien también pide reserva de identidad. Leszczynski, delegada gremial de la empresa MET AFJP, mantiene una interna sindical con el jefe del Sindicato del Seguro, el moyanista Raúl Martínez. Lidera el Movimiento Unido de Trabajadores de las AFJP y asegura que el sector emplea a 15 mil personas en todo el país, una cifra mayor que la anunciada por el Gobierno. “Nos tomó por sorpresa, nos enteramos por los medios. Por un fallo judicial estamos encuadrados en el Sindicato del Seguro pero no tenemos un convenio colectivo propio, ni representatividad de ese gremio”, asegura. Según Leszczynski, “las empresas Máxima y Orígenes prohibieron a sus empleados emitir opiniones públicas sobre la situación del sector. En HSBC ya despidieron a 600 trabajadores en el último mes”.
“La estatización de las AFJP, sumada a la crisis financiera, afecta a nuestro sector más que nunca. Los bancos ya tienen previsto reducir personal, y ahora se agrega la desvinculación de las AFJP”, asegura un agente de seguros en off the record.
Para Tomada, “el nivel de empleo está ligado al nivel de productividad. En una crisis, todos los sectores tienen que ceder algo. Los sindicatos están siendo muy responsables, y van a tener que ceder algo. Los empresarios van a tener que poner lo suyo, al igual que el Gobierno, que va a aportar las políticas productivas”.
Por Emilia Delfino
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